PLAN KAPUT!
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PLAN KAPUT! |
PROPUESTA DE FORTALECIMIENTO DEL CONICET
Elaborada y aprobada por el personal del Cricyt
(CONICET - Mendoza)
Agosto de 2000.
Se ha instalado en la sociedad un gran debate: ¿es necesaria la Ciencia y la Técnica en la Argentina? ¿Es posible que intente ser herido de muerte el principal organismo científico -el CONICET- sin que este tema interese más que al personal que pasaría a engrosar las "migraciones de cerebros" o las cifras de desocupación? ¿Es la promoción de la C y la T un lujo para un país empobrecido y con 4 millones de argentinos entre desocupados y subocupados?
Sólo ubicando el debate en este contexto y recurriendo al rico proceso histórico que nos abarca como integrantes de una nación, es posible arrojar luz sobre la temática.
Ya Alberdi, en los albores de la Patria, aseguró que estaba inconclusa la primera independencia y debía realizarse la segunda, que entendía como la independencia mental. Aunque con cercanías y diferencias, Sarmiento profundiza este camino, haciendo de la educación pública y gratuita el eje integrador para la constitución del nuevo país.
Desde su mismo nacimiento, nuestro país ha sufrido la dicotomía entre un país dependiente de los centros de poder que, principalmente desde los sectores gobernantes, se instalaron como modelos a imitar, y otro país, el que trabajaba y creaba echando mano a sus experiencias y valoraciones,
ese país que recibía el rico aporte de todos los afluentes que lo integraban. Instalar el modelo eurocéntrico permitió hacer efectivas políticas de dependencia de uno u otro centro de poder.
Ya en el siglo XX, a partir de la década del 40, comienza un proceso de desarrollo industrial que tiende a romper con el esquema que ubicaba a Argentina como país proveedor de materias primas, principalmente agropecuarias. No es casualidad que en ese proceso, a fines de la década
del 50, se diera gran impulso al desarrollo científico y tecnológico, como una de las principales herramientas para llevarlo a cabo. En ese contexto, nace el CONICET, no como contraposición a la actividad universitaria, sino como su complementación.
A partir de 1976 se pierde la ultima oportunidad de desarrollo industrial propio y se reasegura la dependencia con un modelo agropecuario que permite que otros se lleven el valor agregado. Comienza un terrorífico proceso de re-atarnos, más fuertemente que antes, a los dictados de los centros mundiales de poder y por lo tanto un retroceso en el camino a la independencia. Lamentablemente los posteriores gobiernos democráticos no sólo no han revertido este proceso, sino que lo han profundizado. Es en este contexto en el que la ciencia y la técnica hechas en el país dejan de tener sentido para los gobernantes, para quienes los "avances tecnológicos" significan convertirnos en consumidores de las tecnologías compradas llave en mano. Sólo el mercado regula este proceso.
Nosotros sabemos que justamente son la ciencia y la tecnología la herramienta para acortar las brechas entre esos dos países (dependiente o independiente) que se delinearon desde el principio de la historia.
Nosotros sabemos que son la ciencia y la técnica la herramienta para un desarrollo integral de sus regiones que rompa con la antigua contraposición puerto/interior.
Nosotros sabemos que son la ciencia y la técnica propias, desarrolladas por nosotros, la herramienta que pueda estar al servicio de resolver los graves problemas que sufren día a día millones de argentinos, y que no se convierte en una nueva mercancía sólo al alcance de quienes puedan pagar por ella. Conocemos el genoma humano, pero se mueren en Argentina 51 niños por día.
La brecha entre esos dos países al interior del mismo país, se ha agigantado.
Nuestros héroes de la independencia supieron llevar a cabo la primera independencia. Está pendiente la segunda. Y en esta segunda independencia, la ciencia y la tecnología tienen mucho que aportar si son insertas en un proyecto político que logre potenciar todas sus posibilidades: que no antagonice capital/interior, educación/ciencia, ciencia básica/tecnología, universidad/sistema científico. Cada uno de ellos tiene una especificidad, cada uno puede mejor aportar desde lo propio, siempre y cuando haya una verdadera voluntad política de potenciarlos y no de destruirlos.
El principal parámetro por el cual se mide esta voluntad política es el fortalecimiento de todas las instituciones de educación, ciencia y tecnología con el aumento del presupuesto para esta área. Para ello es necesario revertir TOTALMENTE la dirección que hasta ahora se está implementando. Sólo el Estado puede asegurar este proceso. No es un gasto, es una inversión; no es un lujo, es tan necesario como el más básico de los alimentos. Sólo así se hará posible el sueño de nuestros primeros libertadores.
Sólo así no dilapidaremos una vez más nuestras posibilidades de independencia
Nosotros creemos, como dijo García Márquez, "que las condiciones están dadas como nunca para el cambio social, y que la educación y la ciencia serán los órganos maestros. Una educación desde la cuna hasta la tumba, inconforme y reflexiva, que nos inspire un nuevo modo de pensar y nos incite a descubrir quiénes somos en una sociedad que se quiera más a sí misma. Que aprovecha al máximo nuestra creatividad inagotable y conciba una ética -y tal vez una estética- para nuestro afán desaforado y legítimo de superación personal. Que integre las ciencias y las artes a la canasta familiar.... Que canalice hacia la vida la inmensa energía creadora que durante siglos hemos despilfarrado en depredación y violencia, y nos abra al fin otra oportunidad sobre la tierra para tener el país próspero y justo que soñamos: al alcance de todos".
En este contexto es que queremos dar los lineamientos de lo que el personal del Centro Regional de Investigaciones ha pensado como posibilidades para enmendar algunos de los problemas que tiene CONICET, que obviamente existen y son perfectibles, como en toda institución formada por personas.
A nosotros no se nos ha preguntado nada, pero no sólo a nosotros, ni siquiera el Directorio del CONICET fue consultado, en una actitud que nos retrotrae a viejas y tristes épocas. El Lic. Caputo ha presentado un plan "estratégico" de disolución del CONICET y su absorción por la Universidad, que no respeta ni lo prometido en la campaña electoral, ni lo diseñado por el Instituto Programático de la Alianza en dicha Campaña.
Se nos ofrecen, como una maravilla, 60 millones de dólares de aumento en tres años, cuando, si respetaran el porcentaje del PBI que prometieron (1%) la cifra no podría ser menor de 700 millones de dólares.
Primero se nos quita presupuesto (en este momento el Cricyt no tiene dinero ni para pagar los servicios), pero se nos "promete" triplicar el presupuesto.
Primero se nos tilda de "ineficientes" y después se nos devuelve parte del recorte salarial como "premio a la productividad", sin decir obviamente cómo ni quién la mide, y abarca a todos los estamentos, de lo que se deduce que todos los estamentos son altamente productivos.
Se dice que se quiere incentivar la investigación entre los jóvenes pero los becarios (obviamente la semilla de los investigadores del futuro) cobran sus sueldos en cuotas y con retraso de hasta tres meses, pero se les "prometen" millones de pesos de presupuesto exclusivo para los jóvenes.
El Personal del Cricyt ha discutido en Asamblea los siguientes puntos:
- Participación Provincial:
El Centro Regional está formado por el Gobierno de la Provincia, y la UNC además del CONICET, En la administración del Lic. Bordón la provincia participó junto a los investigadores en el diseño de proyectos de interés regional, y los subsidió. Lamentablemente esta buena experiencia no volvió a repetirse
-Docencia e Investigacion
Fuertemente creemos que docencia e investigación deben estar unidas. Los investigadores y los profesores universitarios deben realizar tareas conjuntas tanto en docencia como en investigación. Pero la realidad muestra que la carga docente se ha visto aumentada por falta de presupuesto y hace difícil la realización de tareas de investigación.
Por otra parte el magro presupuesto universitario ya resulta insuficiente y mal puede absorber obligaciones de otros sectores, esto lo admite el mismo gobierno a través de sus representantes parlamentarios. Dice la diputada Elisa Carrió "Estoy convencida que hay que reconvertir el CONICET, pero este plan implica su disolucion en las Universidades Nacionales y un sistema en crisis no puede pasar a otro sistema muerto".
Actualmente el 75% del personal realiza tareas docentes en las universidades nacionales. Además se debe tener en cuenta la formación de recursos humanos y docencia que se realiza: cursos de posgrado, tesinas, dirección de becarios universitarios, dictado de seminarios de actualización, cursos especiales etc. Esta actividad debería institucionalizarse. También debe recordarse que hay personal del CONICET realizando tareas docentes en universidades privadas.
-Evaluaciones
Mejorar el sistema de evaluaciones redundará en beneficio de la institución, porque permitirá optimizar las tareas y autocríticas que ayudaran a mejorar la calidad de la investigación.
-De los investigadores y becarios
Se propone una nueva estructura para la conformación de las Comisiones Asesoras para garantizar evaluaciones objetivas. Las mismas estarán integradas por investigadores internos y externos. Los integrantes deberán ser elegidos dentro de cada categoría por sorteo entre los investigadores cuyos dos últimos informes de carrera hayan sido aceptables. Todas las categorías de investigadores deberán estar representadas en igual número, para darles la oportunidad a los
investigadores jóvenes de participar en las evaluaciones. Los mismos deberán ser rotativos y no ser re-elegibles en períodos consecutivos y estarán inhibidos de presentar nuevos becarios o proyectos mientras pertenezcan a la comisión.
El reglamento deberá aplicarse estrictamente cuando se identifique personal que no trabaja como corresponde.
El criterio fundamental deberá ser la calidad independientemente del tipo de investigación.
- Del Personal de Apoyo
No podemos concebir la investigación si no es en el contexto de un equipo. El intercambio de ideas y la discusión de distintos puntos de vista enriquece las investigaciones. El personal de apoyo es
indispensable para que el investigador pueda delegar tareas técnicas que exigen gran dedicación, en personal especializado.
Deberá reactivarse el llamado a concurso del personal de apoyo así como jerarquizar la carrera mediante cursos de capacitación, pasantías y asistencia a congresos.
El personal de apoyo, dentro de las posibilidades de sus tareas específicas, deberá tener movilidad para insertarse en los distintos proyectos de acuerdo a las necesidades, previo consentimiento de su investigador responsable.
La evaluación del personal de apoyo realizada por el director de trabajo deberá ser consensuada por todo el grupo de trabajo, con la formación de una comisión de seguimiento en caso de conflicto.
- Investigadores jóvenes
La mejor forma de incorporar a los jóvenes a la investigación es abrir la posibilidad de ingreso a más becarios. En todo el CONICET esta invertida la pirámide de estamentos de investigadores y becarios, esto es, hay menos investigadores asistentes y becarios que investigadores de categorías superiores. Esto se ha debido no a la falta de interés de los jóvenes, sino a la limitación en los cupos y los conocidos cambios en las reglamentaciones que maneja el sistema de becas dentro de la organización, además del congelamiento del ingreso a la Carrera del Investigador Científico durante muchos años.
Concretamente este año hay más de 400 becarios en condiciones académicas de ingresar a la Carrera del Investigador Científico y sólo hay cupo para 140 por razones presupuestarias.
¿Por qué esos becarios, en los que el país invirtió tanto dinero en su preparación, deberían creerle al Lic. Caputo que serán los privilegiados del año 2001?
- Presupuesto
Es el poder político finalmente quien tiene la tarea de repartir el presupuesto, ese mismo presupuesto que desde hace mucho tiempo no es suficiente para Ciencia y Técnica. Ese mismo presupuesto que nos pone en inferioridad de condiciones entre los países del Mercosur que se han dado cuenta, mejor que nuestros gobernantes, de la importancia de la inversión en Educación, Ciencia y Tecnología.
Ese mismo presupuesto que, no ya como científicos, sino como simples ciudadanos, sabemos que alcanzaría si se les pone límite a las ganancias de las empresas privatizadas, si se le pone fin a la corrupción generalizada, si se aplica la ley y "se mete presos" a los evasores, como se comprometió públicamente el Dr. De la Rúa
Sabemos que estas reflexiones no agotan la totalidad de la problemática del CONICET, pero quieren ser nuestro aporte a un tema que nos incumbe y nos preocupa de manera directa.
Estamos convencidos que la generación de conocimiento no debe ser reemplazada por el simple consumo de conocimientos generados en otros países, y que de esta terrible crisis social sólo y únicamente saldremos de la mano de la Educación , la Ciencia y la Tecnología, siempre sumadas
y nunca opuestas o destruidas.
Mendoza, agosto 2000
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