Facultad de Ciencias Exactas y Naturales-UBA   AÑO 16 - NÚMERO 551   LUNES, 13 DE MARZO DE 2006

Meningitis: estar informados, la clave para evitar falsas alarmas

Por Elizabeth Bogdanowiczate (*)

  Se denomina meningitis a la inflamación de las membsranas meníngeas que recubren el cerebro, causada la mayoría de las veces por bacterias y virus, algunos de los cuales pueden dar origen a epidemias o "brotes" de la enfermedad. Afecta principalmente a niños, en particular a los menores de 5 años, aunque en casos de epidemia causada por la bacteria Neisseria meningitidis (Meningococo) se observa la aparición de casos en diferentes edades.

  Según datos proporcionados por la Secretaría de Salud del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, sobre 100 casos de meningitis que afectaron en el año 2003 a residentes de nuestra ciudad, 71 fueron de origen bacteriano y 29 de origen viral.

  La meningitis bacteriana se trasmite por contacto respiratorio: el agente causal es puesto en suspensión a través de las gotitas de saliva que se expulsan al hablar, toser, estornudar, etc., lo que posibilita que pueda ser inhalado por otra persona. La expresión clínica de la enfermedad, sus signos y síntomas, difieren según la edad del paciente afectado.

  En los lactantes pequeños se observan trastornos en la regulación de la temperatura, depresión respiratoria, coloración azulada de la piel. En lactantes de más de 3 meses aparece fiebre, irritabilidad, rechazo del alimento, letargo y tendencia al sueño, regular estado general.

  En los niños mayores de 2 años, adolescentes y adultos se encuentra el síndrome meníngeo clásico: fiebre, cefalea intensa, fotofobia (rechazo a la luz), nauseas y vómitos, rigidez de nuca, somnolencia, posición en gatillo de fusil. Debemos establecer que algunas de las medidas de prevención son útiles para todas las meningitis y otras son específicas sólo para las meningitis producidas por cierto tipo de bacterias o por algunos virus. Para ser efectiva, la prevención debe cumplirse tanto en el nivel individual como en el comunitario.

  A nivel individual, cuando se trate de meningitis bacterianas, deberá establecerse aislamiento respiratorio hasta cumplir 24 horas de tratamiento antibiótico específico.

  En el ámbito comunitario, también frente a casos de meningitis bacteriana, los recaudos a considerar son Observar el cumplimiento diario en la limpieza de las instalaciones, especialmente de las superficies planas. Deberá utilizarse para ello lavandina diluída al 10% (1 litro de lavandina en 10 litros de agua).

  La meningitis bacteriana es una enfermedad aguda que puede dejar secuelas neurológicas si no es identificada y tratada rápidamente. Algunas de estas posibles secuelas son: déficit auditivo, defectos plásticos, déficit motores, déficit intelectual, convulsiones, hidrocefalia, alteraciones endócrinas. La mayoría de las meningitis de origen viral, en cambio, tienen un curso clínico benigno y autolimitado y curan en pocos días sin dejar secuelas.

  Para mayor información División Infectología del Hospital de Clínicas "José de San Martín",
Av. Córdoba 2351, 3º piso (1120) Ciudad de Buenos Aires, Teléfono: 5950-8744/8748, lunes a viernes de 8 a 15 horas.

(*) Hospital de Clínicas - UBA.