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Martes 21 de marzo de 2005 Por Carolina Vera.
Señores miembros de los claustros de profesores, graduados, estudiantes, personal administrativo y técnico, autoridades de la Universidad y nacionales, colegas, compañeras y compañeros. Quiero empezar agradeciendo y reconociendo a la confluencia de profesores, graduados y estudiantes que ha permitido la continuidad de un proyecto de construcción de Facultad de excelencia académica y al servicio del país, que se ha venido gestando lentamente desde los inicios de la democracia y fortalecido durante la gestión del Decano Jacovkis. Continuaremos bregando para que en esta nueva etapa el proyecto sea enriquecido por la amplia discusión entre todos los sectores de nuestra Facultad, donde se privilegie las coincidencias sobre el disenso. Son innegables los progresos logrados en la democratización y modernización de nuestra Facultad, con una organización completamente departamental, con una planta de profesores y docentes auxiliares en su gran mayoría por concursos limpios y abiertos, con becas de ayuda a estudiantes, con proyectos de apoyo a la extensión, y con una formación continua de futuros científicos y profesionales de excelente nivel. Pero también somos conscientes de las tareas pendientes y en consecuencia, antes de dejar la palabra al Decano Aliaga, humildemente quiero llamar la atención sobre uno de los puntos en particular que pensamos promover desde el Consejo Directivo y el Ejecutivo. El mismo se refiere a la necesidad de avanzar en un proyecto de Facultad más cohesionado en lo académico y científico, de cara a las necesidades de nuestro país. Sin desmedro de la autonomía universitaria, la Facultad debe dar respuesta a las acciones enmarcadas dentro del plan nacional de CyT, debiendo a su vez estar involucrada en su generación. Asimismo, la Facultad debe ser activa promoviendo y creando canales que faciliten el abordaje interdisciplinario en la investigación y la extensión, como método de trabajo para la contribución a la solución de los problemas nacionales. Estos canales no sólo deberán facilitar la cooperación e interacción entre actores dentro de la Facultad sino también permitir una vinculación efectiva con otras instituciones del país e inclusive con aquellas en países vecinos, con los que compartimos entre otras realidades, la necesidad de promover un desarrollo económico autónomo y sustentable en la región. El estudio interdisciplinario requiere de una adaptación a éste de la enseñanza superior. Todos somos conscientes de la deuda pendiente que tenemos en nuestra Facultad con la actualización de los planes de estudio de nuestras carreras. Tal actualización debe incluir entonces una mayor articulación entre las carreras de grado actuales y promover la formación de graduados con dominio en el abordaje interdisciplinario. La continuidad del proyecto universitario así como la posibilidad de generar estos cambios profundos necesitan sin embargo de una política de Estado que potencie la educación, la ciencia y la tecnología. Reafirmamos entonces nuestro compromiso de reclamar ante las autoridades nacionales por el aumento del presupuesto universitario y por la recomposición salarial de los docentes universitarios. No puedo dejar de decir unas palabras frente al hecho que ni el decanato ni el vicedecanato de nuestra Facultad, han sido ocupados previamente por una mujer. Si bien la distribución es relativamente equilibrada en lo que respecta a la participación de mujeres en el sistema científico argentino especialmente en los niveles iniciales, la situación cambia drásticamente cuando se analiza la participación diferenciada por sexo en instancias de conducción y decisión, donde las mujeres están marcadamente sub-representadas. Existe entonces un largo camino por recorrer en particular en la esfera de políticas públicas, de manera de contar con medidas concretas que tiendan a eliminar en el sistema científico-académico tanto la segregación de las que todavía son objeto las mujeres como también aquellas que en especial sufren sectores postergados de nuestra sociedad. Éstas solo serán posible en un contexto de proyecto de país más justo e igualitario. Somos parte de una generación que a fines de la dictadura luchó desde los centros de estudiantes, por la democratización de la universidad y de nuestro país, que ayudó a cambiar la Facultad como docentes auxiliares y graduados y que luego de 20 años está alcanzando los niveles de conducción. En este contexto, y en la memoria de nuestros detenidos-desaparecidos que lucharon por una sociedad más justa e igualitaria, reafirmo mi compromiso de trabajo y dedicación con la tarea que hoy se inicia. Muchas gracias.
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