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Jueves 27 de abril de 2006 Por María Fernanda Giraudo. Dentro del predio de Ciudad Universitaria está próximo a inaugurarse el Monumento a las Víctimas del Terrorismo de Estado, en el Parque de la Memoria. Este Parque es una extensión de 14 hectáreas ubicada en la franja costera del Río de la Plata y constituye un paseo público destinado al público en general, con el objetivo de mantener viva la memoria del horror de la última dictadura militar argentina, en manifiesto repudio a las violaciones a los Derechos Humanos. Este espacio no pretende dar por cerradas heridas que jamás podrán cerrarse, ni suplantar la verdad y la justicia, sino ser un testimonio y un homenaje a las personas cuyas vidas pretendió borrar un gobierno de facto que violó los derechos más elementales. El Monumento contendrá los nombres de los detenidos-desaparecidos y asesinados que constan en el informe eleborado por la Comisión Nacional sobre Desaparición de Personas (Co.Na.Dep.), depurado y actualizado por la Subsecretaría de Derechos Humanos y Sociales del Ministerio del Interior de la Nación, y los de aquellos que con posterioridad hubieran sido denunciados ante el mismo organismo, o proporcionado conjuntamente por los Organismos de Derechos Humanos. Además contará con un espacio que permita la incorporación de los nombres de aquellos detenidos-desaparecidos o asesinados que pudieran denunciarse en el futuro. El Monumento se levanta frente al río porque en sus aguas fueron arrojadas muchas de las víctimas («vuelos de la muerte»), y fue diseñado como un corte, una herida abierta en una colina de césped, despojada de cualquier otro elemento. Los nombres se asentarán sobre estelas de pórfido a lo largo de un recorrido que comienza en una de las plazas y termina en la rambla, sobre el río. Un recorrido en rampa, procesional, lleva al encuentro con los nombres de cada uno de los desaparecidos y asesinados. Los gestores Los organismos de derechos humanos que desde hace 30 años vienen reclamando verdad y justicia en relación con el terrorismo de Estado, presentaron un proyecto para crear un lugar de recuerdo y homenaje frente al Río de la Plata: un parque de esculturas y un monumento con los nombres de los desaparecidos y asesinados. Apoyada por legisladores de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la iniciativa se convirtió en ley el 21 de julio de 1998. El artículo 3 de la ley 46 de la Ciudad de Buenos Aires dio origen a la Comisión pro Monumento a las víctimas del terrorismo de Estado. La Comisión convocó y organizó el concurso de esculturas “Parque de la Memoria” y supervisa la ejecución de las obras para la realización del Parque. Además, tiene atribuciones para recibir nuevas denuncias sobre personas detenidas-desaparecidas y asesinadas por el terrorismo de Estado y para evaluar su inclusión en la nómina del Monumento. La Comisión pro Monumento está integrada por legisladores y por representantes del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, de la Universidad de Buenos Aires y de los organismos de derechos humanos. Arte, memoria y reflexión Un grupo de esculturas distribuidas a lo largo del Parque apunta a generar la reflexión de los visitantes en torno al pasado reciente, un pasado que no es tal mientras no se haga justicia. Se presentaron 665 proyectos, provenientes de 44 países. La amplia respuesta a la convocatoria demuestra que el arte es una de las principales herramientas para la reflexión y la elaboración de la memoria colectiva. Doce de ellas fueron elegidas. Para la elección de los ganadores, el Jurado tuvo en cuenta la contemporaneidad de los lenguajes tanto como el sentido poético del conjunto, estableciendo una serie de principios de orden ético y estético coherentes con el propósito del Parque de mantener viva la memoria hacia el futuro. Otras seis esculturas serán realizadas por artistas invitados por la Comisión pro Monumento, sobre la base de su prestigio, su trayectoria y su compromiso con la defensa de los derechos humanos. De un número a una identidad El Parque de la Memoria contará con un centro de información destinado a recuperar la memoria acerca de quiénes fueron los desaparecidos y asesinados por el terrorismo de Estado. La metodología represiva utilizada, en su intento por no dejar rastros, se propuso borrar los nombres, la historia, y la vida de quienes secuestraba y asesinaba. Hacer memoria es, también, recuperar la identidad de las víctimas. El centro de información se propone sacarlos del anonimato y de ese número incierto que nada dice sobre quién fue cada uno de ellos. La Comisión pro Monumento necesita reunir datos y otros elementos que ayuden a recuperar la identidad de quienes figurarán en la base: datos personales, sobre las circunstancias de su desaparición o asesinato, fotos, recuerdos, anécdotas, cartas, poesías. Para cumplir con este cometido, convoca a todos aquellos que hayan conocido a alguna de las personas desaparecidas o asesinadas a hacerle llegar la información con que cuentan a través de la página web: http://www.parquedelamemoria.org.ar/base/index.htm
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Uno
de los proyectos ganadores es el Retrato de Pablo Míguez, una
fundición de acero inoxidable de 1,60 x 0,50 x 0,70 m